Young-nam, una agente de policía novata, es enviada a un pequeño pueblo costero como castigo por su conducta. A su llegada, conoce a Dohee, una niña que ha perdido a toda la familia que tenía y que ha quedado al cuidado de su padrastro, un hombre agresivo con problemas de alcoholismo. Young-nam no tarda en encariñarse con la pequeña y decide acogerla en su casa.