Una pequeña aldea gala sigue resistiendo la ocupación romana. Desesperado, Julio César decide cambiar de táctica y, en vez de utilizar sus ejércitos, ordena construir al lado de la aldea una lujosa residencia para romanos, convencido de que ésto hará caer en la tentación a los rebeldes. Astérix y Obélix intuirán los verdaderos planes del César.