Otis, un representante de artistas, consigue subir a bordo de un barco cargado de importantes personalidades y actores. Su idea es que al llegar a Nueva York pueda conseguir un gran papel en la ópera para sus dos amigos cantantes. Los líos a bordo no han hecho más que empezar.
Esta película marcó el inicio de la segunda parte de la carrera de los Hermanos Marx, contratados por el productor Irving Thalberg para los estudios MGM. Groucho reconoció que esta era su película favorita de todas las que rodaron en su carrera.
El film mezcla gags cómicos, números musicales y una historia de amor en segundo plano (algo que, normalmente, los hermanos aprovechaban para meter a su hermano Zeppo quien, sin embargo, quedó fuera del reparto de esta comedia). Este tipo de guion seguía una fórmula creada por el propio Thalberg y perfeccionada a través de una gira por Estados Unidos. La reacción del público fue la que determinó que tipo de escenas iban a formar la película y asegurarse así el éxito en la taquilla.