Axel Foley, un detective de Detroit conocido por su sentido del humor y su carácter impulsivo, recibe la inesperada visita de su amigo Mikey. Al poco de llegar a la ciudad, Mikey es asesinado y Axel seguirá el rastro de su asesino hasta Beverly Hills. Allí la policía encarga el caso a dos torpes agentes que se niegan a colaborar con Axel en su investigación, pero éste seguirá empeñado en descubrir porqué mataron a su amigo y en qué negocios estaba involucrado.
A principios de los ochenta, Eddie Murphy destacó como uno de los actores y guionistas con más talento del programa Saturday Night Live. El director Walter Hill le dio su primera oportunidad en la gran pantalla con Límite: 48 horas y John Landis le fichó después para su comedia Entre pillos anda el juego, pero no sería hasta Superdetective en Hollywood donde Murphy se cruzó con uno de sus mayores éxitos, el descarado Axel Foley, un agente de policía de Detroit que investiga la muerte de un viejo amigo en Beverly Hills. Su pegadiza sintonía es inconfundible.