El abogado Atticus Finch, un hombre justo y respetado, acepta defender a un joven negro acusado de haber violado a una mujer blanca, en un pequeño pueblo del Sur, durante la época de la Gran Depresión. A pesar de que las pruebas demuestran su la inocencia, los prejuicios racistas no le pondrán las cosas fáciles a Atticus.